¿Son los antibióticos la causa, y no la solución, de las ITU recurrentes?
LUNES, 9 de mayo de 2022 (HealthDay News) -- Las infecciones del tracto urinario (ITU) son comunes y con frecuencia fáciles de gestionar, pero algunas mujeres sufren una infección tras otra. Ahora, un nuevo estudio apunta a un culpable: los antibióticos usados para tratarlas.
Las ITU pueden afectar a cualquiera, pero son particularmente prevalentes entre las mujeres jóvenes. Los estudios sugieren que hasta un 80 por ciento de las mujeres desarrollan una ITU en algún momento, y más o menos una cuarta parte tienen recurrencias frecuentes.
El motivo exacto de que estas mujeres sufran episodios repetidos no ha estado claro.
El nuevo estudio, que se publicó en la edición del 2 de mayo de la revista Nature Microbiology, ofrece evidencias tempranas de un motivo potencial. Los antibióticos que se usan para tratar a las ITU podrían preparar el terreno para infecciones repetidas, al agotar las bacterias beneficiosas del microbioma intestinal.
El microbioma se refiere a la inmensa variedad de bacterias que viven de forma natural dentro del cuerpo, la mayoría en los intestinos, y que ayudan a mantener el funcionamiento fluido de las funciones vitales, incluso de la función inmunitaria.
La conformación de estas bacterias siempre está en flujo, y se ve influida por varios factores, desde la dieta hasta el uso de antibióticos. Cualquiera que haya tenido problemas digestivos tras un curso de antibióticos ha sentido estos efectos.
También se sabe que los intestinos son un "reservorio" de una bacteria en particular que provoca a la mayoría de las ITU, la llamada E. coli uropatogénica. De hecho, con frecuencia las ITU surgen mediante la "ascensión" de estas bacterias de los intestinos al tracto urinario, explicó Scott Hultgren, uno de los investigadores séniores del nuevo estudio.
En teoría, dañar el delicado equilibrio entre las bacterias intestinales "buenas" y las "malas" podría predisponer a algunas mujeres a ITU recurrentes.
Pero, hasta ahora, los estudios no han indagado en la pregunta, apuntó Hultgren, profesor de microbiología molecular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, en St. Louis.
Entonces, Hultgren y sus colaboradores reclutaron a 31 mujeres, de 18 a 45 años. De las mujeres, 15 habían sufrido ITU recurrente, tres o más en el año anterior. A lo largo del año siguiente, los investigadores recolectaron muestras de sangre y orina, además de muestras mensuales de heces, de las mujeres. En ese periodo, hubo 24 ITU más en el grupo del estudio, todas en las mujeres que habían estado sufriendo los episodios recurrentes, y el tratamiento usual fue con antibióticos.
En general, encontraron los investigadores, el aspecto del microbioma intestinal de las mujeres con ITU era distinto que el de las demás mujeres. Tenían mucha menos diversidad en las bacterias buenas, y menos microbios que producían butirato, un ácido graso que ayuda a controlar la inflamación.
Por otra parte, las mujeres en el grupo de comparación fueron igual de propensas a mostrar E. coli causante de ITU en los intestinos, y a veces estos gérmenes se desplazaban a sus vejigas. La diferencia era que esas mujeres no desarrollaban ITU.
Según los investigadores, todo esto sugiere que las mujeres libres de ITU podían controlar a los gérmenes malos, mientras que las mujeres con ITU recurrentes no podían, posiblemente debido a alteraciones en las bacterias intestinales.
Un gran factor desconocido es cómo todo se desequilibra en primer lugar, comentó Ashlee Earl, investigadora cosénior del estudio. ¿Fue el tratamiento antibiótico para la primera ITU? ¿O hubo una alteración en el microbioma intestinal, por cualquier motivo, que preparó a las mujeres para la primera ITU, y el antibiótico empeoró la situación?
"Está por determinarse", señaló Earl, del Instituto Broad del MIT y la Universidad de Harvard, en Cambridge, Massachusetts.
Un punto más amplio, anotó, es que este estudio es un balde de agua fría para la idea tradicional de que las ITU recurrentes son un asunto de la "higiene".
"Las ITU recurrentes pueden estar rodeadas de un estigma", afirmó Earl. "Pero esto no tiene que ver con la higiene. Es algo que sucede dentro del cuerpo".
La Dra. Karyn Eilber, una uróloga que no participó en el estudio, dijo que los hallazgos tienen sentido, y que encajan con una longeva preocupación de que es probable que los antibióticos se usen en exceso para las ITU.
Sin duda hay ocasiones en que los antibióticos son necesarios, lo que incluye a una ITU que presente con fiebre, indicó Eilber, del Centro Médico Cedars-Sinai, en Los Ángeles.
"Pero si su médico le recomienda un antibiótico, siéntase libre de preguntarle si es necesario", planteó.
A veces, es posible simplemente tratar los síntomas, por ejemplo mediante el uso de analgésicos para gestionar la incomodidad abdominal. Otra alternativa para las ITU recurrentes, comentó Eilber, es un fármaco llamado metenamina. Funciona al hacer que la orina sea más ácida y frena el crecimiento de las bacterias, y los estudios han mostrado que puede prevenir las ITU recurrentes.
Otra opción para algunas mujeres, apuntó Eilber, es el estrógeno vaginal: tras la menopausia, el revestimiento de la vagina disminuye, lo que puede fomentar el crecimiento de bacterias malas, y a veces conducir a las ITU. El estrógeno vaginal lo contrarresta, y podría prevenir las ITU recurrentes en algunas mujeres.
La esperanza es que haya opciones de tratamiento adicionales en un futuro cercano.
"Intentamos desarrollar nuevos compuestos para mermar de forma selectiva a la E. coli uropatogénica, al mismo tiempo que mantenemos el microbioma intestinal intacto", añadió Hultgren.
Un compuesto de este tipo, basado en el azúcar manósido, se está evaluando ahora en un ensayo clínico.
Por ahora, observaron los investigadores, no se sabe si algún cambio en la dieta o los probióticos puede ayudar a prevenir las ITU recurrentes.
Más información
La Oficina para la Salud de la Mujer de EE. UU. ofrece más información sobre las infecciones del tracto urinario.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTES: Ashlee Earl, PhD, senior group leader, Bacterial Genomics Group, Broad Institute of MIT and Harvard, Cambridge, Mass.; Scott Hultgren, PhD, Helen L. Stoever professor, molecular microbiology, Washington University School of Medicine, St. Louis; Karyn Eilber, MD, urologist, Female Pelvic Medicine and Reconstructive Surgery, Cedars-Sinai Medical Center, Los Angeles; Nature Microbiology, May 2, 2022, online
Related Posts
Few NICUs Regularly Screen for Social Determinants of Health
WEDNESDAY, Dec. 28, 2022 (HealthDay News) -- Fewer than one in four U.S....
Texas Judge Says ACA Cannot Require Coverage for PrEP
THURSDAY, Sept. 8, 2022 (HealthDay News) -- Hundreds of thousands of Americans...
Gene-Tweaked Stem Cells Offer Hope Against Sickle Cell Disease
THURSDAY, Aug. 31, 2023 (HealthDay News) -- A type of gene therapy that...
New Ablation Treatment Could Improve A-Fib Care
WEDNESDAY, March 8, 2023 (HealthDay News) -- A quicker, safer option for...