Comenzar la escuela más tarde también mejora la salud de los padres
MARTES, 11 de enero de 2022 (HealthDay News) -- Durante varios años, un importante grupo de pediatras de EE. UU. ha planteado que las escuelas intermedias y secundarias comiencen a una hora más tarde en la mañana, para ayudar a los jóvenes a dormir lo suficiente.
Ahora, una nueva investigación sugiere que los estudiantes no son los únicos que se benefician de una hora de inicio de la escuela más tarde: los padres también se toman un respiro.
"Los niños no viven en un vacío. Viven en un complejo sistema familiar. En particular, en la mañana, la mayoría de los padres reconocen que están implicados hasta cierto nivel con ayudar a sus hijos a despertarse", señaló la autora del estudio, Lisa Meltzer, profesora de pediatría de National Jewish Health en Denver.
"Entonces, si los estudiantes tienen que despertar temprano, los padres tienen que despertar temprano. Al ajustar los horarios de inicio de la escuela se afecta la hora a la que los padres tienen que despertarse para ayudar a sus estudiantes a levantarse y prepararse para la escuela por la mañana", apuntó Meltzer.
Para aprender más sobre cómo los horarios escolares afectan a los padres, el equipo de la investigación se asoció con Cherry Creek Schools, un gran distrito escolar del área de Denver.
Cherry Creek Schools adaptó sus horarios de inicio, y la escuela intermedia y la secundaria comenzaban unos 50 a 70 minutos más tarde en la mañana. Los estudiantes de primaria, que no experimentan los mismos impactos negativos de un horario de inicio más temprano, según los expertos, fueron a la escuela una hora antes de lo usual.
Los padres con hijos entre kindergarten y el decimosegundo curso completaron encuestas anuales antes del cambio, y durante dos años tras el cambio de los horarios. Los padres reportaron la hora a la que se iban a la cama y se levantaban, la calidad del sueño y si se sentían cansados.
El estudio encontró que cuando sus hijos mayores tenían que levantarse un poco más tarde, los padres también dormían más. Aunque fue una cantidad pequeña por noche, de unos 20 minutos, equivalió a 60 horas adicionales para cada padre a lo largo del año escolar, apuntó Meltzer. Los investigadores también encontraron que más padres dormían al menos siete horas por noche.
Los padres de los estudiantes de primaria mantuvieron sus hábitos de sueño normales, y cambiaron sus horarios de irse la cama y levantarse a una hora ligeramente más temprana, mostraron los hallazgos.
Los investigadores de cualquier forma observaron beneficios en los padres que tenían hijos en ambos grupos de edad, porque el horario de inicio de las escuelas primarias no era tan temprano como el horario anterior de los estudiantes de secundaria.
"Sabemos que el sueño se vincula con todos los aspectos de la salud y el bienestar", aseguró Meltzer. "Sabemos que se vincula con la salud física: dormir lo suficiente se relaciona con unos mejores resultados de salud, entre ellos un peso sano y la salud cardiovascular", añadió.
"Sabemos que se relaciona con el desempeño, la atención y la conducción con somnolencia. Sabemos que se relaciona con la salud mental. Las personas que duermen más tienen menos síntomas de depresión y ansiedad, y un funcionamiento familiar general [mejor]", continuó Meltzer. "Como hace años que sabemos, dormir lo suficiente es importante para los niños, pero también para los adultos. Y mejorar el sueño de los padres ayuda a mejorar el funcionamiento de toda la familia".
El estudio hizo referencia a la recomendación de 2014 de la Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics), de que la escuela intermedia y la secundaria no deben comenzar antes de las 8:30 a.m., para que los adolescentes puedan dormir más cada noche.
Los investigadores concluyeron que el cambio en el horario de inicio escolar tiene "un efecto de onda significativamente positivo en el sueño y el funcionamiento diurno de los padres con hijos en secundaria, y los padres de los estudiantes de la escuela primaria reportaron un impacto mínimo".
Los hallazgos se publicaron en una edición reciente en línea de la revista Sleep Health.
Despertar más tarde no solo proveyó muchos beneficios para la salud física y mental, sino que creó menos conflicto en la interacción entre padres e hijos, comentó la Dra. Cora Collette Breuner, profesora de pediatría y medicina para adolescentes, y médica tratante del Hospital Pediátrico de Seattle.
"Los padres duermen más porque no tienen que levantar a sus hijos", aclaró Breuner, que no participó en el estudio.
Cuando los niños llegan a la adolescencia, sus ritmos circadianos cambian, anotó. Ya no están tan cansados a finales de la noche, pero de cualquier forma necesitan una cantidad adecuada de sueño. Los estudiantes con un horario de inicio más temprano también tendían a ser menos propensos a desayunar, ya que tenían que apresurarse a salir, añadió.
Un área de preocupación comunitaria respecto a que los estudiantes de secundaria comiencen y salgan de la escuela más tarde que sus hermanos pequeños es que no puedan estar en casa para cuidarlos. Breuner comentó que ha luchado contra esta idea.
"No es normativo que un adolescente de 15 años cuide a sus hermanos menores. Las escuelas deben proveer cuidados extraescolares para los niños cuyos padres trabajan, y respaldar a los padres y contar con maestros después de la escuela que sepan lo que están haciendo, ayuden a los niños con la tarea y [a hacer] ejercicio físico y les den comida", apuntó Breuner.
El cambio en los horarios de inicio es difícil para las comunidades, reconoció Meltzer. Cherry Creek Schools se implicó mucho con la comunidad antes de implementar los nuevos horarios. Algunas escuelas también ofrecieron servicios de cuidados antes de la escuela para ayudar a los padres que no podían modificar su horario laboral. Las actividades extracurriculares se adaptaron para que funcionaran con los nuevos horarios de salida.
"Deben suceder varias cosas, y el cambio es difícil y aterrador, pero los beneficios de aumentar el sueño de estudiantes y padres son de verdad importantes", aseguró Meltzer.
Más información
Michigan Medicine ofrece más información sobre los patrones de sueño en la adolescencia.
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
FUENTES: Lisa Meltzer, PhD, pediatric psychologist and professor, pediatrics, National Jewish Health Center, Denver; Cora Breuner, MD, MPH, professor, pediatrics/adolescent medicine, and adjunct professor, orthopedics and sports medicine, University of Washington, Seattle, and attending physician, Seattle Children's Hospital; Sleep Health, Oct. 8, 2021, online
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